Material vs tiempo

Por Nicolás Mayorga   

sin-titulo3“Las piezas valen en ajedrez por lo que hacen y no por su simple existencia en el tablero. Esto es una verdad que todos comprenden, pero que casi ningún jugador novicio practica. En el afán de capturar algún peón adversario dilatan el desarrollo de sus piezas y resulta que, si aparentemente tienen ventaja material, están en desventaja de tiempo, ya que han perdido varios en procura de una hipotética superioridad.” Así empieza el célebre tratado general de ajedrez escrito por el maestro argentino Roberto Grau. En mi opinión, esta sutil contradicción, que ya es clásica en el estudio del ajedrez, se podría aplicar e incluso arrojar algo de claridad al debate que Ernesto Guevara desarrolló frente a los defensores del ‘cálculo económico’.

Estimulo material vs conciencia

“Sí, el estímulo material se opone al desarrollo de la conciencia, pero es una gran palanca para obtener logros en la producción, ¿debe entenderse que la atención preferente al desarrollo de la conciencia retarda la producción? En términos comparativos, en una época dada, es posible, aunque nadie ha hecho los cálculos pertinentes; nosotros afirmamos que en tiempo relativamente corto el desarrollo de la conciencia hace más por el desarrollo de la producción que el estímulo material y lo hacemos basados en la proyección general del desarrollo de la sociedad para entrar al comunismo, lo que presupone que el trabajo deje de ser una penosa necesidad para convertirse en un agradable imperativo”, Ernesto Guevara, Sobre el sistema presupuestario de financiamiento (1964).

El ajedrez nos enseña que existen diferentes tipos de ventajas y desventajas, contradictorias entre sí. Como el comandante de un ejército revolucionario, el ajedrecista debe analizar fríamente el desarrollo de cada una de las posibilidades, comprendiendo la transformación de las ventajas en una larga batalla.

Una ventaja dinámica es aquella que pueden explotarse en un corto plazo, normalmente suele partir de un pequeño sacrificio, puede ser de un peón, varios peones o una pieza. Es una ventaja muy efímera que exige rápidos movimientos y una efectiva movilización de cada una de las piezas. Cada tiempo es vital, si le damos al adversario la posibilidad de reagrupar su ejército se extingue la ventaja dinámica y se queda sencillamente con una desventaja material. El factor tiempo es el decisivo en este tipo de ventaja.

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Spassky y Fischer

Esto nos lleva al análisis de dos posturas antagónicas al respecto: Hay jugadores que movilizan su ejército de una forma armoniosa y están dispuestos a sacrificar material para conseguir la iniciativa. Ejemplos de esta postura frente al tablero son Boris Spasky o Miguel Tal. Hay otros jugadores que movilizan sus piezas para conseguir una ventaja material, sin importarles si se exponen a un fuerte ataque del adversario. Confían en la capacidad defensiva de sus piezas, aun cuando se encuentran sin coordinación en el tablero. Jugadores como Robert Fischer o Victor Korchnoi son reconocidos por formar parte de este segundo tipo.

Esta última situación se puede utilizar para el análisis de un estado proletario que moviliza a sus empresas y los trabajadores con el principio de la autogestión financiera. Es decir, los impulsa a la búsqueda de una ventaja o estímulo material. Aunque esto genere otras ineficiencias, existe la confianza general de que el (supuesto) incremento de la productividad y la abundancia de mercancías arreglará lo que este mal. Es así como se le abre las puertas a la ley del valor en la Unión Soviética.

El Che pensaba de otra manera: “Para los partidarios de la autogestión financiera el estímulo material directo, proyectado hacia el futuro y acompañando a la sociedad en las diversas etapas de la construcción del comunismo no se contrapone al ‘desarrollo’ de la conciencia, para nosotros sí. Es por eso que luchamos contra su predominio, pues significaría el retraso del desarrollo de la moral socialista”, Ernesto Guevara, Sobre el sistema presupuestario de financiamiento (1964).

Y continúa: “De allí que sea tan importante elegir correctamente el instrumento de movilización de las masas. Este instrumento debe ser de índole moral, fundamentalmente, sin olvidar una correcta utilización del estímulo material, sobre todo de naturaleza social” (Ídem.).

Respecto al funcionamiento del Sistema Presupuestario de Financiamiento, la forma en que debían relacionarse las empresas que actuaban en conjunto, bajo un plan económico único dirigido por el Estado, el Che reflexionaba: “Nuestro concepto fundamental es que en todo este proceso el producto va adquiriendo valor por el trabajo que se ejerce sobre él, pero que no hay ninguna necesidad de relaciones mercantiles entre las empresas; simplemente los contratos de entrega y las correspondientes órdenes de compras, o el documento que deba exigirse en el momento dado, significan la sanción de que se ha cumplido con el deber de producir y entregar determinado producto. El hecho de la aceptación de un artículo por parte de una empresa significaría (en términos algo ideales en el momento actual, es preciso reconocerlo), la aceptación de la calidad del producto. Este se convierte en mercancía al cambiar jurídicamente de posesionario, al entrar en el consumo individual. Los medios de producción para otras empresas no constituyen mercancías, pero debe valorárselos de acuerdo con los índices que anteriormente propusimos, comparando con el trabajo necesario en la norma destinada al consumo para poder adjudicarle un precio al medio básico o materia prima de que se trate” (Ídem.).

foto_1-_el_che_haciendo_trabajo_voluntario-5b796El Che no se cansó nunca de señalar que la disciplina que cada trabajador debe desarrollar hacia su trabajo, debe ser consciente y libre. Es por eso que él mismo impulsó en Cuba la práctica del trabajo voluntario, cuya palanca fundamental era el estímulo moral, saber que se está haciendo algo por el bien de toda la sociedad y no por la obligación (si uno no trabaja no come). Para el Che éste es el camino que conduce al comunismo, producción y conciencia no pueden separarse.

“Hacer que el deber social sea el punto fundamental en el cual se apoya todo el esfuerzo del trabajo del obrero, pero vigilar la labor consciente de sus debilidades, premiar o castigar, aplicando estímulos o desestímulos materiales de tipo individual o colectivo, cuando el obrero o la unidad de producción sea o no capaz de cumplir con su deber social” (Ídem.).

Ahora vamos a ver una complicada partida que ilustra claramente el tema tratado: Boris Spassky tendió una trampa a Bobby Fischer con un ‘peón envenenado’ en la defensa Siciliana Najdorf.

Spassky,Boris V (2660) – Fischer,Robert James (2785) [B97]
World Championship 28th Reykjavik (11), 06.08.1972

1.e4 c5 2.Cf3 d6 3.d4 cxd4 4.Cxd4 Cf6 5.Cc3 a6 6.Ag5 e6 7.f4 Db6 8.Dd2 Dxb2 9.Cb3 Da3 10.Axf6 gxf6 11.Ae2 h5 12.0–0 Cc6 [12…Cd7 … 13… Cc5] 13.Rh1! [13.Cb1 Da4 (13…Db4 14.De3 Ca5? 15.a3 Cc4 16.Dd4+-) 14.a3 Ce7 … 15… Ad7] 13…Ad7 pos214.Cb1!! Db4 [14…Da4 15.a3! (15.De3 Cb4; 15.c4 15…Db4 16.De3 Ca5) 15…Ce7 (15…Dxe4 16.Ad3 Dd5 17.c4+-) 16.Cc3 Dc6 17.Tf3 … Tfd3, Td1 ,… f5, … Ca5, Cd4 ±/; 14…Db2 15.a4 (15.a3 Tc8 16.Tf3 (16.Cc3 Ca5) 16…f5 (16…Ce5 17.Tc3! Ah6 18.g3 h4 19.Rg2 hxg3 20.hxg3 Tg8 21.Rf2±) 17.exf5±) 15…d5! 16.exd5 Cb4 17.Ca3 Tc8 Timman (17…Cxd5)] 15.De3 … 16.a3, 17.Cc3 +- 15…d5? [15…Ce7! 16.a3 Da4 17.Cc3 Dc6 Purdy 18.Tad1 ±/] 16.exd5 Ce7 17.c4 Cf5 18.Dd3! [18.Df2?! a5 … 19… a4] 18…h4? … 19… Cg3 [Mejor es 18…Tc8; 18…exd5 19.Cc3! (19.cxd5 0–0–0 … 20… Ad6) 19…dxc4 20.De4+ … 21.Cd5 +-; 18…Db6 19.Cc3 De3 20.Dc2 ±/+-] 19.Ag4 … 20.Af5 19…Cd6 20.C1d2 f5? [20…exd5 21.Axd7+ Rxd7 22.Dxd5+-] 21.a3 Db6 [21…Da4 22.Dc3 … 23.Dh8, … 23.Cc5 +-] 22.c5 Db5 [22…Da7 23.cxd6 fxg4 24.dxe6 Axe6 25.f5+-] 23.Dc3 fxg4+- [23…Th7 24.a4 Ag7 25.Cd4 Axd4 26.Dxd4 Da5 27.Af3+-] 24.a4 h3 25.axb5 hxg2+ 26.Rxg2 Th3 27.Df6 Cf5 28.c6 Ac8 29.dxe6 fxe6 30.Tfe1 Ae7 31.Txe6 1–0


 

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